Muchas de las sustancias que producen las abejas melíferas son utilizadas en medicina natural por todos sus beneficios, como son la miel y la Jalea Real. El propóleo, otra de ellas, aunque menos conocida, se está abriendo paso en nutrición y medicina natural.
Desde Pharysol os explicamos qué es el propóleo, cuáles son sus beneficios, cómo podemos consumirlo y si este cuenta con contraindicaciones.
¿Qué es el propóleo?
La RAE define el propóleo, o propólis, como una “sustancia cérea con la que las abejas bañan y barnizan sus colmenas antes de empezar a obrar”. Siguiendo esta definición, podemos decir que el propóleo es una mezcla de resinas obtenidas por las abejas de la yema de los árboles, de exudados de savia y de otras fuentes vegetales, que procesan y que posteriormente utilizan como sellante de huecos, para hacer la colmena más segura y para evitar enfermedades y parásitos.
El aspecto del propóleo depende de la fuente de la que se obtiene la resina, siendo el color más habitual el marrón oscuro y normalmente se presenta en forma de granos, sin embargo también puede encontrarse líquido.
¿Cuáles son los beneficios del propóleo?
Se tiene constancia del uso de propólis ya en época faraónica y se ha utilizado tradicionalmente como antibiótico (es rico en bioflavonoides), antiséptico y fungicida.
También destaca por sus propiedades antioxidantes, antiinflamatorias, antialérgicas, remineralizantes y anticancerígenas.
Entre sus beneficios encontramos los siguientes:
- Ayuda en la lucha contra tumores en cabeza, colon, mama, próstata, riñones, sangre, páncreas o hígado.
- Previene infecciones y mejora la curación de heridas y quemaduras.
- Es muy beneficioso en procesos catarrales y problemas de las vías respiratorias como gripe, resfriado, bronquitis, asma, tuberculosis, sinusitis, anginas o faringitis.
- Se utiliza en tratamientos bucales contra periodontitis, gingivitis o caries.
- Combate verrugas, herpes, parásitos como la giardiasis e infecciones como la cistitis o candidiasis.
- Es eficaz como remedio en casos de problemas digestivos como diarrea, úlceras o gastritis.
¿Cómo tomar propóleo?
El propóleo puede tomarse solo o junto a otros elementos nutricionales como la Jalea Real o vitaminas. Puede presentarse de forma sólida (en granos) o líquida, en crema, loción, tabletas, cápsulas o extractos.
Debido a sus amplias propiedades antibacterianas, antisépticas, antiinflamatorias y antioxidantes, podemos encontrarlo como ingredientes de diversos remedios y fármacos antigripales.
Aunque la dosis puede variar según los casos, se recomienda una concentración diaria de 70 miligramos.
¿Cuáles son las contraindicaciones del propóleo?
A pesar de que este remedio natural sea considerado sin riesgo, nunca podemos decir que el hecho de que algo sea natural sea inocuo y recomendable en todos los casos.
Es fundamental consultar con un experto sobre la posibilidad de consumirlo y si presentamos contraindicaciones.
El propóleo no es recomendable para personas que padecen alergia a la miel o a las abejas, si se padece asma alérgico o si se está en estado de gestación o lactancia.
Nunca se debe exceder la dosis recomendada, puesto que un consumo excesivo puede provocar desequilibrios gastrointestinales y debe utilizarse en períodos cortos.
Si sufrís de resfriados o gripe o precisáis de mayor información sobre el propóleo u otros remedios naturales contra ellos os invitamos a seguir nuestros consejos del blog y a conocer nuestros productos con ingredientes de origen natural que os ayudarán a tratar y prevenir procesos catarrales.
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