Cuida tu garganta y evita la ronquera con estos consejos

¿Sufres ronquera con frecuencia? Entonces quizás deberías revisar algunos hábitos que seguro que forman parte de tu día a día y que están dañando tus cuerdas vocales. ¿Hablas durante muchas horas al día y a un volumen elevado? ¿No bebes suficiente agua al día? Aprende a cuidar tu garganta siguiendo estos sencillos consejos:

Cómo evitar quedarse ronco

No fumes. El tabaco es una de las cosas que más irritan la garganta. Al tragar humo y hacerlo pasar entre las cuerdas vocales, estamos favoreciendo la aparición de lesiones como los edemas y los pólipos y de enfermedades más serias como el cáncer de laringe. Por eso, es importante que evites fumar y que también procures no respirar el humo de los demás.
Evita el café. El café y cualquier bebida que contenga cafeína hará que tus cuerdas vocales se resequen. Por esta razón, en la medida de lo posible, trata de evitar su consumo.
Evita los ambientes ruidosos. Los ambientes bulliciosos como bares, restaurantes o conciertos te obligarán a subir el tono de voz cada vez que necesites hablar. Por eso, si estás en un sitio ruidoso y quieres mantener una conversación prolongada, lo ideal es que salgáis.
Aprende a respirar. A veces, cuando utilizamos el aire pulmonar al hablar, notamos como si nos faltara el aire. Para evitar esto y la consecuente ronquera, debemos aprender a respirar con nuestro diafragma.
No tomes alimentos muy calientes ni muy fríos. Tanto las comidas y bebidas muy frías como aquellas excesivamente calientes, irritarán tus cuerdas vocales. Los cambios bruscos de temperatura pueden derivar en ronquera, así que mejor tomar los alimentos y líquidos a una temperatura templada.
Humidifica el ambiente. Si el ambiente de nuestra casa es muy seco hará que, en consecuencia, se resequen nuestras cuerdas vocales. Para evitar esto, podemos utilizar un humidificador, sobre todo a la hora de dormir.
Descansa la voz. Una de las causas principales de ronquera es el hablar de forma excesiva haciendo un mal uso de la voz. Por eso, si consideras que hablas demasiado durante el día, trata de hacer lo siguiente: guarda silencio durante unos 15 minutos, 2 o 3 veces al día.
Bebe agua. Beber bastante agua te ayudará a mantener tus cuerdas vocales limpias e hidratadas y a prevenir la ronquera. Además, puedes hacer gárgaras con agua tibia y sal para asegurarte de que limpias todas las impurezas de tu garganta. Esto te ayudará también a quitar la voz ronca una vez ha aparecido. Otra cosa que puede serte de mucha ayuda es Pharysol, un producto elaborado a base de ingredientes naturales que alivia al instante el dolor de garganta y ayuda a eliminar virus y bacterias.
Evita carraspear. Cuando tenemos mucosidad, el carraspeo es un gesto muy habitual que, sin embargo, provoca daños a nuestras cuerdas vocales. Para aclarar la voz, hazlo de la siguiente forma: suelta el aire por la boca al tiempo que pronuncias una H.
Relaja tu cuello. Haz estiramientos girando la cabeza lentamente en 360 grados. Practica este ejercicio varias veces al día para relajar esta zona de tu cuerpo.

Si la ronquera permanece durante más de dos semanas o aparece acompañada de otros síntomas como tos con sangre (ronquera con tos) o dificultad para respirar, acude al médico de inmediato para que pueda evaluar las causas que la están provocando.