Frutas ricas en vitamina C: las mejores frutas para el resfriado

El invierno es época de resfriados, ya lo sabes. Sin embargo, prevenir los resfriados está en tu mano, llevando una vida saludable y comiendo muchas frutas y verduras. De este modo, tu organismo estará más protegido ante los virus. Y, si llegas a enfermar, combatirás mejor los síntomas y las consecuencias no serán tan importantes.

Beneficios de la fruta en invierno

Las frutas tienen numerosos beneficios para la salud. Uno de los más interesantes es que, al ser ricas en vitaminas, ayudan a fortalecer el sistema inmunitario. Por eso la fruta es francamente recomendable para luchar contra los síntomas de los resfriados y la gripe.

Los cambios bruscos de temperatura tan propios del otoño y el invierno provocan que el sistema inmune se debilite. Para restituir su función, nada como la ingesta de nutrientes que favorezcan la generación de anticuerpos capaces de hacer frente a virus y bacterias. Y las frutas son el mejor aliado que podemos encontrar.

Por supuesto, no todas las frutas son iguales. Las mejores frutas para el resfriado son las que tienen un mayor contenido en vitamina C. Y es que el ácido ascórbico protege el sistema inmunológico y mejora su capacidad de defensa. De esta manera, aunque no impide por sí mismo que nos resfriemos, sí que nos ayuda a combatir catarros y gripes.

Por otra parte, cuando estamos resfriados, es muy importante reponer líquidos con frecuencia, más aún si tenemos algo de fiebre. Esto nos ayudará a sentirnos mejor y a recuperarnos antes. Pues bien, aquí también encontramos la ayuda infalible de las frutas jugosas: naranjas, mandarinas, kiwis o piña, por ejemplo. Tanto en forma de zumo como en entero, estas frutas nos aportan agua y nutrientes para restituir los líquidos perdidos.

5 frutas esenciales en invierno

1. Cítricos. Las naranjas, los limones y los pomelos, como seguramente ya sabes, contienen un alto porcentaje de vitamina C. Quizá menos conocido es el alto contenido en aminoácidos esenciales, que también contribuyen al buen funcionamiento del sistema inmunitario. La vitamina C y los aminoácidos esenciales contrarrestan los efectos perniciosos de los radicales libres y mejoran la producción de glóbulos blancos, que son los encargados de luchar contra las infecciones.
2. Granada. Esta fruta de temporada puede considerarse un superalimento, dada su alta concentración de vitaminas A, B y C. Pero es que también es rica en fibra y aminoácidos esenciales, imprescindibles para fortalecer el sistema inmune y favorecer la absorción de los nutrientes presentes en nuestra alimentación.
3. Manzana. La manzana no solo es rica en vitamina C, sino que tiene propiedades alcalinas. Esto significa que ayuda a regenerar el pH sanguíneo, algo esencial si queremos que nuestro organismo aproveche al máximo los nutrientes que obtiene de los alimentos.
4. Piña. La piña es una de las mejores frutas para no resfriarse, porque tiene gran cantidad de vitaminas, minerales, enzimas y proteínas. Por otra parte, la piña contiene bromelina, que tiene efectos antiinflamatorios y antibacterianos. Por eso, la pila está especialmente indicada para combatir el dolor de garganta y la congestión nasal. Además, la piña es muy digestiva, ya que tiene un alto contenido en fibra. Esto también contribuye a cuidar la microbiota intestinal, que es esencial para mantener en forma el sistema inmunológico.
5. Mango. El mango es una de las frutas más recomendables para luchar contra las enfermedades del sistema respiratorio. Además de tener propiedades antiinflamatorias, también es un poderoso expectorante, por lo que puede ser muy útil para tratar la tos y la congestión.

Aunque todo el año es importante cuidarse de forma natural, en los meses fríos es imprescindible para prevenir resfriados o combatirlos. Por eso, no dejes de comer frutas con vitamina C en invierno y si no puedes frenar el síntoma de la congestión nasal te recomendamos Pharysol Sinus, 3 veces más eficaz que el agua de mar.