Pocas cosas hay más molestas que empezar las vacaciones con un resfriado. Sin embargo, es algo que ocurre con frecuencia, sobre todo cuando el inicio de nuestros días de descanso comienza con un viaje en avión. Y es que no es poco frecuente que caigamos enfermos como consecuencia de los cambios de temperatura que sufrimos al subirnos a este medio de transporte. Si estás a punto de comenzar tus vacaciones y quieres evitar pasar tus días de descanso con las molestias típicas del resfriado, te conviene leer estos consejos que hemos preparado para evitar resfriarse en el avión.
Cómo evitar un resfriado en el avión
- Prepárate antes de coger el vuelo. Si tienes tendencia a resfriarte y tienes previsto coger un vuelo largo, es recomendable que evites los excesos los días previos y te esfuerces en cuidar especialmente tu salud. Descansa, aliméntate bien y toma alimentos ricos en vitamina C para llevar las pilas cargadas antes de comenzar tus vacaciones. Si te encuentras en plena forma, será mucho más difícil que caigas enfermo.
- Extrema las medidas de higiene. Si te es posible, lávate las manos con frecuencia utilizando jabón, especialmente antes de comer. Si no te resulta fácil hacerlo en el avión, puedes llevar contigo un bote de gel desinfectante o un paquete de toallitas, que podrás utilizar también para limpiar algunos de los lugares más manoseados, como es el caso del reposabrazos o la bandeja.
- No te olvides de hidratarte. Beber mucha agua (u otras bebidas como zumos o infusiones) te ayudará a mejorar el estado de las mucosas de tu nariz y garganta. Además, manteniéndote bien hidratado prevendrás también otros trastornos como dolores de cabeza o fatiga. Aun a riesgo de resultar obvios, debemos recordarte que, cuando hablamos de beber líquidos, por supuesto no nos referimos a bebidas alcohólicas, las cuales debes evitar durante el viaje en avión.
- Lleva ropa apropiada para el vuelo. Ya sabes que es bastante probable que en el vuelo vayas a pasar frío, incluso viajando en verano. ¿Cómo vestirse en el avión? Pues es recomendable que lleves una chaqueta ligera o una sudadera y vistas pantalones largos el día del vuelo. Además, es recomendable que te cubras la garganta y la boca si el ambiente en el avión está especialmente frío. Ten especial cuidado con los cambios bruscos de temperatura, tanto al montar en el avión como al bajarte de él.
- Prepara un pequeño botiquín. Puede ser útil que lleves contigo algunos analgésicos y antiinflamatorios por si durante el vuelo sintieses algunas molestias como dolor de cabeza, dolor de garganta o, incluso, dolor muscular. Por otra parte, los productos de Pharysol Tos, Pharysol Sinus y Pharysol Spray, compuestos a bases de ingredientes naturales, pueden serte de gran ayuda para mejorar los síntomas de resfriado que pudieran aparecer durante el vuelo.
- Protégete. Si te encuentras sentado al lado de alguien que tose, estornuda o parece tener fiebre, sería recomendable que, siempre que fuese posible, te cambiases de asiento. Puedes preguntar educadamente al personal de vuelo si esto sería posible, explicándoles que temes ponerte enfermo tú también.
Deja un comentario