Cuando escuchamos mencionar el ácido hialurónico indiscutiblemente pensamos en tratamientos de belleza o más recientemente también en la recuperaciones de lesiones musculoesqueléticas.
Sin embargo, el ácido hialurónico presenta cualidades tan beneficiosas para la salud que su aplicación no solo se reduce a estos casos, si no que también es excelente en otros ámbitos de la medicina como es el caso del dolor de garganta.
Desde Pharysol os explicamos qué es el ácido hialurónico y cuáles son sus beneficios contra el dolor de garganta.
¿Qué es exactamente el ácido hialurónico?
El ácido hialurónico (AH) es una molécula natural presente en nuestro cuerpo, que forma parte en su mayoría del tejido conectivo, y de textura viscosa. Su característica principal y más reconocida es un poderosa capacidad para atraer y retener el agua en grandes cantidades.
¿Por qué se produce el dolor de garganta?
El dolor de garganta puede producirse por varias causas tales como sobreesfuerzo, frío o infecciones bacterianas o víricas, sin embargo, lo que todos tienen en común es que esto se manifiesta en una sequedad que produce irritación e inflamación de la zona, a las que sigue el dolor.
¿Cuáles son los beneficios del ácido hialurónico para el dolor de garganta?
A continuación pasamos a detallaros todas las propiedades beneficiosas del ácido hialurónico que pueden aplicarse contra el dolor de garganta:
Provee de hidratación
El ácido hialurónico es capaz de captar hasta 6 litros de agua , hasta 1000 veces su peso molecular en agua, penetrando en la piel o mucosas y uniendo esta agua a las células de la zona. Estas capas, por lo tanto son infundadas de una recuperadora humedad, lo que directamente también proporciona una mayor suavidad.
Es un poderoso humectante
La capacidad de captar agua no sería nada sin una igual capacidad para mantenerla y retenerla, controlando sus niveles.
Mejora la barrera lipídica
La piel y otras superficies corporales cuentan con una capa de lípidos o grasas que contribuyen a la retención del agua y bloquean la humedad. El ácido hialurónico la refuerza y mejora sus capacidades.
Aumenta la resiliencia natural
Como acabamos de comentar el ácido hialurónico contribuye a que otros elementos del cuerpo, como las barreras naturales, mejoren su estado y sus funciones. Esto conlleva una mejora de la resiliencia, a una mayor capacidad del cuerpo de defenderse contra factores externos.
Estimula la regeneración celular
Por los beneficios anteriormente mencionados, el ácido hialurónico ayuda a la regeneración celular, lo que promueve que los tejidos dañados por cualquier motivo se repongan.
¿De dónde podemos extraer el ácido hialurónico?
El ácido hialurónico puede ser aportado desde el exterior o su producción puede ser activada. A pesar de que existen múltiples formatos y vías para aplicar ácido hialurónico, mediante la alimentación y productos naturales podemos aportar niveles beneficiosos a nuestro cuerpo.
Los tubérculos, ricos en almidón activan la producción de ácido hialurónico, mientras que verduras como las espinacas, la lechuga, las coles de Bruselas, la coliflor, el brócoli, los espárragos, los pimientos o las judías verdes, grandes fuentes de magnesio, permiten la síntesis de este.
Alimentos altos en zinc como la calabaza, los cacahuetes, los cereales integrales, las judías blancas, el arroz integral y la levadura también son una potente vía de consumo de ácido hialurónico, ya que los niveles de este se relacionan con los niveles de zinc.
La soja, mediante su tendencia a aumentar los niveles de estrógeno también aumenta los niveles de esta sustancia, mientras que algunas frutas como las granadas, arándanos, albaricoques, peras, naranjas, kiwis, limones, uvas, piñas y plátanos, ricos en magnesio también favorecen su aporte.
Finalmente, no podemos hablar del ácido hialurónico sin el consumo de abundante agua.
Ya sabéis, si estáis pasando por un molesto dolor de garganta os invitamos a seguir nuestros consejos y a conocer nuestra amplia gama de productos antigripales.
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