El cielo está nublado, hace viento, frío o empieza a llover y lo que nos viene a la cabeza es quedarnos en casa tranquilos y cómodos, seguramente pasando el día siguiendo el socorrido y acogedor plan del “sofá, manta y peli (o serie)”. Es bueno que nos dediquemos tiempo a nosotros mismos, descansemos y nos relajemos, sin embargo, desde Pharysol os explicamos por qué es bueno optar por planes caseros y os daremos alternativas.
¿Por qué es bueno optar por planes caseros en días fríos?
El contacto con el exterior, la naturaleza, el aire, el sol, es bueno no solo para nuestra salud física, sino también mental y emocional, sin embargo, cuando las condiciones climatológicas son adversas, poco a poco vamos trasladando nuestro día a día a interiores.
En condiciones de baja temperaturas y humedad, no solo podemos sentirnos incómodos, sino que existe más tendencia a que nos resfriemos o nos contagiemos de gripe.
Al contrario de lo que se piensa, el frío y la humedad no hacen que nos resfriemos, sin embargo, estos virus respiratorios sobreviven mejor y permanecen activos más tiempo en lugares fríos. El frío y el viento, por el contrario, sí pueden afectar a nuestra garganta, haciendo que se reseque su mucosa, esté menos protegida y se irrite.
Además de protegernos de los mencionados problemas de salud, hacer planes caseros también puede aportarnos momentos familiares, de autocuidado, o para realizar aquellas tareas que siempre postergamos. En definitiva, también pueden ser beneficiosos para nuestro bienestar emocional.
Alternativas de planes caseros más allá del “sofá, manta y peli”
Al llegar a casa tras un día agotador o al pasar un fin de semana en casa, sobretodo cuando hace mal tiempo, suele ser común querer tumbarse en la cama o sofá bien tapados mientras se disfruta de una serie o película.
No hay nada malo en ello, sin embargo, hay muchos otros planes para hacer en casa los días de frío que seguro que os gustarán, os damos algunas ideas:
- Hacer manualidades con material reciclado, como papel, cajas de cartón, telas…
- Jugar a juegos de mesa en familia.
- Meditar y hacer yoga.
- Cocinar un pastel, galletas, pan… ¡lo que os apetezca!
- Mirar álbumes de fotos antiguos
- Planificar algunas metas (como por ejemplo, un viaje)
- Redecorar la casa.
- Leer, o escribir un diario o libro.
- Estudiar una nueva habilidad, como un idioma o tocar un instrumento.
Si seguís queriendo disfrutar de una buena sesión de “sofá, peli y manta” os damos algunos consejos para que mientras lo hacéis os cuidéis al máximo y descanséis lo mejor posible:
- Intentad descansar en un sitio cómodo y sin ruido.
- Utilizad ropa cómoda.
- Controlad que la temperatura de la habitación sea adecuada, aproximadamente de 18º.
- Optad por ambientes con luz tenue u oscuros para descansar mejor.
- Escoged tentempiés sanos, como por ejemplo infusiones calientes.
Si queréis saber más sobre cómo cuidar vuestra salud y la de vuestros seres queridos, os recomendamos seguir los artículos de nuestro blog y os invitamos a conocer nuestra amplia gama de productos con ingredientes de origen natural.
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