La astenia está presente durante las cuatro estaciones del año. Existe la astenia invernal, la primaveral, la veraniega y la otoñal. Hoy te explicamos en qué consiste la astenia primaveral, cuáles son sus causas, síntomas, y cómo prevenirla.
La primavera, la estación de la felicidad
La primavera está considerada la estación de la felicidad, la más alegre del año. Es el renacer del cuerpo y mente.
Se trata de la temporada más esperada en todas partes. De hecho, alrededor de todo el mundo se organizan diversas fiestas para celebrar su llegada: el Año Nuevo chino, la Fiesta de los Faroles o Festival de las Linternas, el Baile de los Cerezos (Miyako Odori en Japón), el Holi en India, entre otros.
¿En qué consiste la astenia primaveral?
Sin embargo, no todo es un cuento de hadas. Con el paso del invierno a la primavera, más de la mitad de la población presenta alguno de los síntomas asociados a la astenia: fatiga a nivel mental, cansancio físico, insomnio, irritabilidad, pérdida del apetito, problemas de memoria y concentración, tristeza sin motivos, falta de libido, ansiedad y estrés.
La astenia primaveral es el tipo más común de astenia. No es una enfermedad y no tiene unos síntomas palpables, sino que es una sensación subjetiva de debilidad y fatiga que reduce la capacidad de realizar distintas tareas, así como trabajar.
¿Cuáles son las causas de la astenia primaveral?
Aunque no tiene una causa orgánica definida, los factores ambientales de la astenia primaveral son:
- Cambios horarios. Está muy relacionada con el reloj biológico.
- Cambios climáticos. En este caso, las altas temperatura, la subida de presión atmosférica, y más horas de luz.
- Y como consecuencia de las anteriores, también cambios en la rutina diaria, así como en el horario de sueño, comida u ocio.
- Ciclos hormonales. Los cambios estacionales generan un descenso de los niveles en sangre de ciertas hormonas y neurotransmisores. Esto produce una sensación de decaimiento físico e intelectual.
¿Cómo prevenir la astenia primaveral?
Estos son algunos consejos para prevenirla la astenia primaveral:
- Anticipa los cambios horarios de forma paulatina.
- Descansa adecuadamente, entre 7 y 8 horas al día.
- Resta horas del día a los dispositivos móviles y pantallas, sobre todo antes de irte a dormir.
- Adelante la hora de la cena.
- Pasa más tiempo al aire libre, aprovechando los rayos de sol. Esta es una buena opción para aumentar la producción de serotonina y mejorar tus emociones.
- Camina 30 minutos al día al aire libre. También haz yoga, pilares o zumba. ¡Y libera el estrés!
- Piensa en positivo para mejorar el estado de ánimo.
- Aférrate a tus rutinas y marca nuevos propósitos.
- Lleva una alimentación sana y equilibrada. Las frutas y verduras frescas de temporada (limones, fresas, albaricoques, entre otras) son imprescindibles, ya que aportan vitaminas, antioxidantes y minerales. Añade también lentejas y la quinoa a tu dieta. ¡Detoxifica y aporta más frescura al organismo!
- Controla el exceso de café, bebidas alcohólicas y azúcares.
- Añade algunos complementos alimenticios, así como la maca o el ginseng indio.
- Hidrata tu cuerpo, sobre todo durante los días más pesados.
Los síntomas de la astenia primaveral son leves y pasajeros, ya que suelen desaparecer al cabo de unos días sin necesidad de tratamiento. De todas formas, si los síntomas se agravan (trastornos de alimentación, depresión, etc.), debes ir al médico para que analice tu caso.
Pon en práctica todos estos consejos para superar la astenia primaveral. Si quieres saber más, te recomendamos seguir los artículos de nuestro blog y te invitamos a conocer nuestros productos con ingredientes de origen natural.
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